Este blog personal estuvo activo de marzo de 2008 a julio de 2010. La continuación está en jeri4queen.blogspot.com

jueves, 20 de mayo de 2010

La historia no es un arrebato carnal

Hay un señor llamado Francisco Martín Moreno, que participa en radio haciéndose pasar por historiador, siendo que es novelista.

En su último best seller: “Arrebatos Carnales”, hace ficción de las bajas pasiones de algunos de los personajes historicos de México. Creo que es muy bajo agarrarse del morbo que existe en torno al sexo para hablar de Hidalgo, Morelos, Díaz, Villa, etcétera. Aclaro que no he leído su libro ni lo haré. Por eso, este post no es sobre el libro, ni estoy en contra del mismo. Entiendo que es ficción y entiendo el por qué se vende.

Sin embargo, en este México en donde el respeto se confunde con popularidad, el señor ha estado diciendo sandeces, como por ejemplo, que necesitamos cambiar el Himno Nacional para modernizarlo, y que el retraso en la educación en México es consecuencia de la colonia y específicamente, culpa de la Iglesia.

Ver la historia con mente, ojos y moral actual es una absoluta estupidez y el señor lo hace repetidamente.

La época colonial fue resultado directo de una guerra que perdieron las civilizaciones que vivían en el territorio que ahora es México; la mexica fue sólo una de ellas. Como colonizadores, los españoles tenían el visto bueno del Papa y la misión de convertir, no de educar. En un gobierno monárquico y absolutista, el concepto de educar la mente del pueblo no existe. Así era la forma de pensar de entonces. Yo me pregunto: ¿cuántos habitantes del pueblo francés sabían leer y escribir antes de la Revolución Francesa?

Al instalarse las órdenes religiosas en la Nueva España crearon colegios en los que educaban a criollos y peninsulares. De acuerdo con lo que usted dice, señor Moreno. Sin embargo esa élite fue la que empezó la Revolución de Independencia. Algunos de estos colegios fueron fundados por Jesuitas, una orden religiosa que sostiene que es posible llegar a dios a través de la razón y educaba bajo una filosofía humanista. Colegios de los cuales salieron nombres como Primo de Verdad, Allende, Aldama y Domínguez (Colegio de San Ildefonso) quienes en 1793 convivieron con un tal Antonio de Montenegro, enjuiciado por la Inquisición por el cargo de conspiración contra la corona, por pensar en una América (no México) Independiente. 1793. Diecisiete años antes de que la conspiración queretana fuera descubierta.

Lo que el señor Moreno se olvidó comentar -tal vez porque no sabe- es que sí existieron escuelas de indios. También se olvidó de una forma de organización política y administrativa que aglutinaba a un alto porcentaje de la población llamada Pueblos de Indios. Había gobernantes indígenas -electos- y de los impuestos cobrados, un porcentaje se dedicaba para las fiestas religiosas; y para el siglo XVIII, incluía a la educación, más allá de sólo castellanizar y evangelizar. También se inculcaba el leer y escribir, pero había un problema: al ser la escuela en castellano, los padres indígenas sentían repugnancia y pérdida de identidad. Además, al alejar a los niños del campo, dejaban de ganar dinero. Dinero que encima, ellos tenían que pagar por la educación.

No soy católica y creo que actualmente, la instrucción religiosa (cualquiera) cierra, en vez de abrir, la mente. Sin embargo, no puedo negar la importancia de la Iglesia Católica durante esta época de nuestra historia, época que según los spots del gobierno no cuenta, porque tenemos sólo "200 años de ser mexicanos".

Soy sólo una aficionada a la historia, lo admito. Pero me da mucho coraje que, si bien el mexicano conoce una madrecita de nuestro pasado, venga gente carismática y diga estupideces que además de falsas o incompletas, las juzgue con ojos del siglo XXI y concluya que por eso, estamos jodidos desde siempre.

8 comentarios:

Sivoli dijo...

Si hay algo que me castra es el nuevo término "novela histórica" porque aclaran los críticos que son relatos basados en investigación histórica, pero con la sal y pimienta del quesque-novelista-historiador-investigador-lo-que-sea y entonces surgen algunas chambas que son verdaderas mamadas, si bien hay algunas que valen la pena. Pero nomás basta ver a personitas como Velasco Piña, empecé a leer a Paco Ignacio Taibo II y me dio hueva... en definitiva no me late ese género, o más bien: alguna de la raza que escribe dentro de él.

Joel BD dijo...

Mejor regrésate de computita, esto de las letras la verdad no se te dá...

La Rosy dijo...

Sivoli: así es, solo alguna raza. ¿Además es obligatorio que uses grandes nombres? Con situarse en la época y darle ese enfoque / problemática creo que es suficiente.

Joel BD: Awww ternurita! me extrañas! besos =)

Sivoli dijo...

¡Ándale! ¡exactamente! no es indispensable que tal o cual lío de nalgas le haya pasado a Juárez o a Hidalgo, para que la historia pueda ser interesante y bien contada. Definir una época, un entorno y referentes "históricos" (no necesariamente involucrados en la trama principal) debería de bastar para que surja una historia chingona.

Pero bueno, otra cosa es el bu$$ine$$

Joel BD dijo...

Es lo malo de ser rico y no tener nada nuevo que hacer, regresas una y otra vez al mismo congal

La Rosy dijo...

Joel: Creo que es el comienzo de una hermosa y larga relación destructiva. Que bonito. SNIF

Anónimo dijo...

Antes de la Revolución Francesa había muchos, muchísimos, franceses alfabetizados. Francia era el país puntero en cultura. Cierto que el escritor al que haces referencia escribe sobradamente idioteces, pero él lo sabe, y también que no es historiador, y que lejos está de ser novelista. Es un vendedor y según sé le va muy bien. Por cierto, Dios se escribe con mayúscula, y fuera de eso escribes bien.

La Rosy dijo...

dios es con mayúscula sólo para los creyentes. já.

Y todo Europa era un cochinero; saber leer no es lo mismo a cultura. Eso sí, había universidades y chingonas, como La Sorbonne... aunque, ¿cuantos tenían acceso?

Gracias por comentar, estoy de acuerdo en dejarle el título de vendedor al ruco.